No hablaba.
Sólo hacía gestos y movimientos.
Fingía correr, pero no se movía del sitio.
Parecía encerrado tras un cristal,
sin que nadie viese cristal alguno.
Se le veía cortar una cuerda,
aunque no hubiese cuerda ni tijeras
en sus manos.
Abría puertas invisibles...
1 comentario:
paso a su lado sin percartarse de su presencia...se extraño de la tranquilidad reinante, se giro y alli estaba ella, encerrada en su mundo de silencio donde no podia oir lo que yo le decia..
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